La lectura es una de las acciones que acompaña a millones de personas en su día a día, aún más cuando hoy se beneficia de las múltiples plataformas con las que contamos. Y, como cada 23 de abril, la literatura toma el protagonismo de la jornada en un nuevo Día del Libro.

Pero, ¿por qué se escogió este día para celebrarlo? La celebración internacional coincidiría con la fecha de muerte de tres grandes autores de la literatura universal: Miguel de CervantesWilliam Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega.

Esta fecha conmemorativa representa una de las más emblemáticas a lo largo de la historia universal, debido a que, para nadie es un secreto que los libros han sido, son y serán siempre una fuente inagotable de conocimientos. Sin embargo, se debe destacar que, a pesar de dicha declaración, hoy día lamentablemente el uso de tan excelente recurso en su versión física ha disminuido producto de la globalización y el auge tecnológico imperante en el mundo entero. Es por ello que, se hace necesario recuperar el hábito de la lectura en todas sus formas, así como también, seguir valorando su importancia, desde todos los ámbitos. La idea es que, los individuos recuperen el gusto por la lectura y se mantenga el firme propósito de quiénes un día tuvieron la brillante idea de crear dicha herramienta cognitiva para el ser humano.

En este mismo orden de ideas, es oportuno recordar que, un libro no es cualquier medio de entretenimiento, un libro es conocimiento, sabiduría, reflexión… Un libro te abre la imaginación a nuevos mundos, a infinidad de sentimientos y emociones, a conocer lugares que quizás nunca se conocerán personalmente…Pero sobre todo un libro es: vida, personalidad, carácter, valoración, entre otros aspectos importantes de la vida.

Por ello, se reitera, en cada oportunidad que se tenga para hablar de este tema que, lo más importante de leer es comprender lo que se lee, conocer profundamente lo que los libros quieren decirnos y, sobre todo vivir todos los procesos educativos y personales, de la mano de este maravilloso y eficiente recurso…dejar de usar un libro, de consultarlo, de entender sus páginas, sus aventuras; sería como tratar de ignorar toda la realidad que nos rodea.  

Un mensaje para reflexionar: “UN NIÑO QUE NO LEE, SERÁ SIN DUDA, UN ADULTO QUE NO PIENSE”. Así que valoremos y usemos los libros…No olviden que el conocimiento y la palabra tienen el poder que se necesita para tomar decisiones asertivas en la vida del ser humano.